¿Qué pasó?

En un principio estaba todo cubierto por las tinieblas, el panorama era desolador, con pocas esperanzas para enfrentar un proceso electoral con tranquilidad y asegurando el triunfo de la renovación de Eldorado, es que la gestión municipal del intendente Martínez no enamoró nunca a la mayoría ni a la minoría de los eldoradenses, su lejanía con la gente durante su mandato y la falta de carisma entre sus funcionarios lo aislaron tanto como la pandemia que durante casi dos años lo ayudó a alejarse aun mas de sus votantes y de su pueblo que lo votó truncando 20 años de aguirrismo en la capital del trabajo. El gobierno provincial con su eterno buen olfato y atendiendo a la necesidad de encontrar alternativas planificó y ejecutó una estrategia de ofrecimiento electoral con dos pesos pesados y un grupo de sublemas para adicionar votos por si hacía falta, siempre hace falta esto, sino es para lo local es para lo provincial. En el horizonte se venía perfilando un candidato que tenía buena imagen por la gestión en el hospital SAMIC en los últimos años, el médico y oriundo de Eldorado Javier “Pipo” Durán, quien estaba destinado en el libreto inicial a sumar al Intendente para asegurar el triunfo de este y del partido despejando las dudas de Posadas respecto del humor de los eldoradenses con el intendente Martínez; nadie pensaba que las alianzas iniciales del nuevo candidato lo alejarían del cómodo segundo lugar que le daban las perspectivas mas alentadoras, pero el apadrinado por el ministro de Salud Pública provincial Dr. Oscar Alarcón en medio de la campaña en ciernes golpeó el panorama político local aliándose con la jefa política de la CEEL María Cristina Bandera actual diputada provincial y responsable de la debacle del anterior capo cooperativo Alberto Romero quien dejó a la CEEL con bandera de remate tras 11 años de interminable y devastadora hegemonía de poder. Este hecho sustentó una nueva escala en las aspiraciones del designado a secundar al poder local y le sacó chapa de competidor por el campeonato, la nueva incorporación le dio peso territorial a Pipo tal como se había dado hace masde tres años atrás cuando Fabio quería desbancar a Norberto e hizo la misma jugada, aliarse a la estructura militante de la CEEL en aquel momento en manos de Romero, es decir que la misma maniobra terminaría por dar el poder a dos intendentes en menos de 4 años. Ante este panorama el plan del ejecutivo municipal que ante la pérdida de sustento político por el desgaste natural pero también por las malas decisiones tomadas en el transcurso de la gestión hacían profundizar el modelo preventista ya asumido como el único posible de usar para encarar con alguna posibilidad de éxito la renovación de su mandato, la compra de voluntades vía contratos, el despilfarro de recursos en campañas mediáticas que se verían en cartelería agobiante y alquileres de sedes en cada barrio o punto estratégico de la ciudad fueron la prueba no solo de poderío económico sino del nerviosismo de no contar con todos los vientos a favor y la vista de un competidor que nunca dejó de crecer en las reservadísimas encuestas que se conocían. La población fue adentrándose en la campaña con un sigilo propio de nuevos tiempos, expectante y pensativa, pero con un ánimo extraño, nuevo, ya no sería arriada por los potros de las bolsitas de mercadería o de las voces mediáticas tradicionales que pregonaban el mensaje de que al intendente en funciones no se le puede ganar. Paralelamente el gobierno provincial ejecutó un plan de obras monstruoso como nunca se vio en Eldorado, obras viales por doquier y el tesoro más publicitado: el nuevo autódromo que fue siempre un anhelo de los tuercas de la región fueron tomados como propia gestión del intendente cuando lo propone a Hugo Kovalski de acompañante de la fórmula como viceintendente, todo esto no fue suficiente y por lo tanto la desesperación continuaba expresándose en la contratación de más y más voluntades contratadas en la figura de prestadores de servicios que se sospecha no eran más que mano de obra electoral, no se sabe a ciencia cierta la cantidad exacta pero se cree que es una cifra varias veces millonaria en costo mensual extraídas del erario municipal que hoy se puede confirmar en los recortes de gastos que generan y que generarán mucha inestabilidad política y económica al municipio no solo en los próximos meses sino en el mediano plazo sino se reacciona adecuadamente especialmente por parte de las autoridades electas para los próximos cuatro años. Es que en las últimas horas se conoció la presentación apurada y conflictiva de una lista de 188 agentes que el ejecutivo pretende pasen a calidad de personal de planta permanente que también es la prueba palpable del pago político a sus militantes del actual intendente. La cifra es inédita en este tipo de gestiones, ni el ex intendente Aguirre se animó a tanto y a tantos y además se cree que hay por lo menos 100 más que esperarán la misma oportunidad. El gremio municipal de UPCN, socio político durante la campaña del intendente, busca desesperadamente llevar a cabo esta maniobra y además enganchar al futuro intendente Dr, Duran en el compromiso de sostener a los prestadores de servicios que nadie sabe la enorme cantidad que son, solo se supo que Martínez se comprometió con un grupo de representantes de estos a mantenerlos hasta el 10 de diciembre como tales. ¿Será posible tamaña erogación en tiempos electorales como estos, con una situación económica tan difícil? En las últimas horas se supo que al aprobar el balance del ejercicio 2022 por parte del concejo deliberante local el resultado arrojó unos 165 millones de déficit en las cuentas municipales lo que se relativizó considerando como producto de diversos factores no aclarados a la comunidad, lo cierto es que en la anterior gestión del intendente Norberto Aguirre nunca se presentó tamaño déficit y representará una grave herencia económica y si se cede a las pretensiones gremiales a una peor herencia política ya que el nuevo intendente fue apoyado por el pueblo de Eldorado para hacer una gestión absolutamente distinta a la que llevó el actual, signada por las más rancias formas de la politiquería barata que hoy asquea a muchos argentinos, es que ese modelo de sostenimiento del poder a cualquier precio ha llevado al país a la situación actual, la búsqueda de empleo publicoen connivencia con los poderosos de turno van dejando a las administraciones publicas cada día más gigantes en relación con la actividad privada que va decreciendo ante la voracidad fiscal por un lado y el desánimo que esto provoca en tantos emprendedores que piensan que su sacrificio es aprovechado para las fiestas oficiales. La proliferación de nuevos sectores, departamentos y direcciones en el ámbito municipal solo es la muestra del clientelismo conque se ha llevado una gestión que no ha sabido apoyar las cuestiones de fondo y solo se ha dejado llevar por el viejo modelo político que hoy la sociedad rechaza y reflejado palpablemente en la victoria de Pipo Duran como nuevo intendente, para sorpresa de propios y extraños, pero con una gran carga política que solo se hará exitosa si se lee bien el gran mensaje de la sociedad. Por otro lado cabe analizar la cifra de votos obtenida por el actual intendente es decir que ha cosechado cerca de 11 mil votos, que a primera vista es una cifra muy alta pero que a poco de verla a la luz de los recursos invertidos para lograrlo nos da una idea de lo mucho que ha perdido en caudal de votos genuinos ya que si consideramos los 10 mil votos obtenidos cuando ganó la intendencia en 2019 y pensando en los recursos invertidos hoy, sale a la luz que sin el manejo de los fondos públicos para su campaña el verdadero caudal electoral del actual intendente no llega a la mitad de los casi 11 mil votos obtenidos, un desgaste que le ha salido muy caro al pueblo eldoradense y que marcará los próximos meses en la falta de respuestas efectivas a las necesidades de nuestra vida cotidiana por vía de un ajuste que se debe hacer so pena de aumentar aún más el déficit municipal. Por último, un párrafo a la oposición local que obtuvo un pésimo resultado, producto de la pasividad en su rol, muestra palpable de esto es la aparición de Noller quien haciendo una campaña austera, creativa y verdaderamente opositora logró imponer un concejal. El resto se durmió en malas decisiones y una pobre vocación de poder que caracteriza desde hace mucho tiempo a algunos dirigentes que ya no tienen mucho futuro individual.